Volvió a la realidad

Independiente no puede hacer bien las cosas en condición de visitante y arranca otra semana complicada para Pepé. Cayó por 4 a 1 ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy. Cahais, Busse, Ferradas y Ariel Montenegro fueron los encargados de bajar de un hondazo –o cuatro- al combinado de Avellaneda. El Rolfi descontó para la visita.

El fútbol no apareció y las pocas jugadas de peligro que se armaron fueron bien disueltas por el local, que presionó durante los 90 minutos. Fue mucho más y se quedó corto en la cuenta final.

Cahais marcó la ventaja para el Lobo jujeño a los 35 minutos de la primer etapa, pero hasta ahí era remontable. Claro, tenían que aparecer las figuras de la victoria (2-0) ante Boca. Y como la estrategia no cambió, el partido encontró el entretiempo con el resultado clavado. ¡Por suerte! Sí, es que el local tuvo más chances para anotar.

El telón volvió a subir y parecía que Independiente había salido con otra actitud, pero duró unos minutos y el segundo gol de Busse, a los 5´, terminó por hundir al Rojo. Lo cierto es que el Rolfi Montenegro no aparecía y a Mancuello no le salió una. Así, llegó el tercer gol. A los 30´, Ferradas sentenció el 3-0.

Y cuando ya estaba el partido liquidado, el 10 del Rojo no quiso que los titulares de los diarios de mañana hablaran de una goleada y descontó a los 41´. Sobre una barrera abierta, la clavó contra el palo y demostró su nivel. Lástima que ya era demasiado tarde...

¿Tarde? No, no, no. Quedaban unos minutos para que Ariel Montenegro, el hermano del Rolfi, sentenciara el 4 a 1. Fue goleada para el Lobo jujeño en su casa y el Rojo es puro lamento.