Desconocido

El Granate cayó por 3-1 ante Caracas en Venezuela, en su segundo partido por el Grupo 6 del torneo. Los dirigidos por Zubeldía dominaron en el primer tiempo pero fueron superados en el complemento. Rey (ST 2m), el argentino Figueroa (ST 4m) y Castellín (ST 27m) anotaron los goles del conjunto caribeño, mientras que Sand (ST 39m) marcó el descuento.

Le costó bastante a Lanús afirmarse en los primeros minutos y adaptarse a un césped en mal estado. El tradicional juego creativo del equipo argentino tuvo dificultades para imponerse y Caracas aprovechó el desconcierto para dañar por el sector de Rodolfo Graieb. Allí, Jesús Gómez y Gabriel Cichero trepaban con facilidad y forzaron una serie de intervenciones de un sobrio Bossio.

Tras la quincena inicial, aparecieron en escena los talentosos Salvio y Blanco, que se sumaron al inteligente Sand. Entre los tres se las ingeniaron para llegar al arco de Vega. Pero el que no estuvo acertado fue Germán Cano, que dilapidó las tres situaciones claras que tuvo.

Luego del descanso, Lanús se transformó en una auténtica sombra que se arrastró por el estadio Nacional. A los 2 minutos, el árbitro colombiano Wilmer Roldán cobró un tiro libre por una mano inexistente de Fritzler. Acto seguido, el defensor José Rey marcó el primer tanto con un tremendo remate que pegó en el travesaño y entró con la claridad suficiente para no dejar lugar a la polémica.

El sector izquierdo que custodiaba Maximiliano Velázquez pasó a ser una zona de caos total donde el dueño de casa frecuentó con facilidad. Por ese sector, Darío Figueroa trepó sin marca y estampó el segundo a los 4 con una definición cruzada. Una cruel pesadilla para los bonaerenses.

Tras los dos mazazos, Lanús, ya con Valeri por Cano, fue al frente sin ideas y aún así contó con dos oportunidades donde careció de suerte. En la más nítida, Hoyos no pudo rematar tras un córner y Sand casi anota de carambola. En cambio, Caracas volvió estirar la brecha gracias a un disparo a colocar de Rafael Castellín.

El descuento de Sand a los 39 minutos, luego de un error del provocador arquero Vega, no alcanzó siquiera para contagiar energía a los jugadores de Lanús. El final llegó junto con una estruendosa ovación de la hinchada local para premiar una cabal demostración de fútbol de su equipo. Para el Granate, que apenas suma un punto, quedó reservada la preocupación.