Un panorama alentador se vislumbra para el entrenador Jorge Vivaldo ya que Víctor Guiñazú evoluciona de un esguince de tobillo y llegaría en condiciones al duelo del sábado ante Tristán Suárez. En la misma situación se encuentra Cristian Quiñónez, que sufrió una contractura en el aductor derecho ante Sarmiento. En cambio, el Tati Bustos Montoya no sería arriesgado.
El lateral diestro evoluciona favorablemente de un esguince de tobillo mientras que el habitual volante por izquierda descansa para recuperarse lo antes posible de la contractura que sufrió ante Sarmiento.
"Salí en el momento justo si me quedaba un rato más la lesión se iba a agravar. Estos días haré trabajos diferenciados para poder llegar. No me quiero quedar afuera pero deberé esperar a ver cómo reacciona el músculo”, explicó Quiñónez, que ayer participó de la tarde de pileta junto al resto del grupo.
Guiña es el que está con unas fichas más para el retorno al equipo, ya que hace más de tres semanas se encuentra en etapa de recuperación. El lateral explicó que se encuentra "mucho mejor” pero explicó que no lo quisieron arriesgar contra Sarmiento para que la lesión no empeorara.
Por su parte, el Tati Bustos Montoya continúa con la molestia en el aductor derecho y ayer realizó trabajo físico y no formó parte de la práctica de fútbol que realizaron los suplente. El delantero señaló que “tiene muchas ganas de estar” pero está en duda su presencia para el próximo compromiso. El técnico lo esperará hasta el viernes.
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